Cicloturista de Fuensalida 31-8-08

Otra cicloturista mas, otro madrugón, he quedado con Félix, Luismi y Julián a las 7,15 donde Gines y llego justito de tiempo, pero puntual. No necesitamos hacer cambios en los coches asi que directamente partimos con lo que llegamos a Fuensalida a las 8,00, recogemos dorsales y a preparar las monturas, en eso estamos cuando llegan Leandro, Antonio, Magan, Javi, Wence y su hermano, ya se me olvido su nombre, mas tarde llegaría Enrique que tardo mas por ir a recoger a un amigo.











Ya son las nueve y todo el mundo esta preparado para salir, por lo visto algunos han llamado que están de camino y se les espera, asi que salimos con retraso, no me fije bien que hora era pero con retraso, un recorrido por las calles de Fuensalida y tomamos un camino, marchamos ligeritos por unos caminos con buena anchura y otros del ancho de un vehiculo pero todos por lo general con el terreno muy suelto, arena y piedras. Marcho delante, fiel a la filosofía 50 100 “ponte delante que ya tendrás tiempo de ir detrás”, por caminos bastante llanos con suaves subidas y bajadas, en una bajada algo mas pronunciada llegamos a Noves donde una hermosa rubia nos recibe a la entrada del pueblo con su perrito en brazos, lo cierto es que estuvo a punto de provocar algún accidente ya que ahí bajábamos a 45 km/h y ninguno miraba al camino, el ardor que la rubia produce nos hace atravesar las calles de Noves como si del pelotón de la vuelta ciclista se tratase entrando en la castellana.

Salimos de Noves con dirección a Quismondo, el trayecto muy parecido a lo anterior y marchando delante se hace bien y divertido, sin riesgos por gente que ande despistada. La entrada a Quismondo y recorrido por sus calles es espectacular, los vecinos del pueblo se vuelcan con nosotros y nos animan y es algo que pone la piel de gallina. Continuamos dirección a Escalona, pocas fotos puedo ofrecer en esta ocasión, la velocidad y el estado de los caminos no permitía la posibilidad de hacer fotos en marcha y si paras cuesta mucho remontar después. Tras cruzar la autovía de Extremadura el recorrido cambia súbitamente, la mayor parte cuesta abajo y ya llegando a la zona del río Alberche la pendiente es importante, solo algún repecho nos hace apretar para subirlo, después una corta senda nos pone al pie de Escalona con su castillo en lo mas alto, hacemos derecha y cien metros mas adelante paramos en el primer avituallamiento.





El avituallamiento esta bien surtido, sándwich, fruta, dulces, bebidas isotónicas, todo esto en una zona arbolada con el río al lado ofrece una zona bonita,



muy bonita



como se puede apreciar.



Tras llegar los últimos, al ir tan rápido se produjo una gran diferencia entre los primeros y los últimos, unos minutos de cortesía y partimos de nuevo.

Salgo tranquilo, a pesar de que muchos salen a toda leche, vamos recorriendo la margen izquierda del río junto a urbanizaciones, cuando estas se acaban y nos internamos en un bosque de álamos o sauces el terreno se pone mas difícil hasta que en un giro a derechas comienza una dura subida agravada con bancos de arena que se pasan peor aun que la subida en si, eso por no hablar de que aun vamos todos muy juntos y se producen embotellamientos, así que tranquilidad y paciencia, paso un banco de arena y en el siguiente repecho voy sin resuello lo que hace que Antonio me pierda y Wence me adelante, me recupero y pongo el ritmo algo mas fuerte para recortar distancias, pero no tengo la suerte de lado y tras una subida el camino hace una curva a izquierdas y después una bajada, tengo a Wence a tiro y en la bajada le quiero pillar, Wence marcha con otro biker detrás, afrontan la bajada mientras yo hago la curva, en ese momento veo como el biker que marcha detrás de Wence cae de mala manera, un reguero lo que se traduce en caída inesperada, paro para ver al caído que se levanta y se palpa para ver que esta entero, le lavo con agua las heridas, pronto llega uno de la organización con ampollas de suero fisiológico, gasas y cristalmina, pero yo me tengo que quedar porque aun estamos en un sitio conflictivo y se nos pueden echar encima otros biker así que me quedo avisando hasta que están listos para seguir.

Marcho con Enrique y Miguel que llegaron cuando me disponía a salir, pero aun me creo capaz de remontar y al ver que en una bajada los dejo atrás continuo el ritmo en la subida. Intento calcular el ritmo para cada subida para hacerlas lo mas fuerte posible y en algunas ocasiones las paso canutas pero después recupero bien y vuelvo a apretar el ritmo, además voy adelantando a muchos lo que me hace crecerme.

Por fin llego al avituallamiento liquido, ya pensaba que lo había pasado sin verlo, tomo un botellín de agua y bebo medio de un golpe, el otro medio me lo hecho por la cabeza, tiro el botellín vacío a un cubo de basura y continuo, que vergüenza, nada mas salir veo por todas partes botellas vacías de agua tiradas en el suelo, somos tan entupidos que nos creemos que una cicloturista tiene una organización como la vuelta a España, tanto salir al campo y andar por la naturaleza para luego ofenderla con nuestros desperdicios, otro biker del club karacol me comenta lo mismo que yo estaba pensando y que algunos que marchan muy rápido piensan que por ir primero merece la pena degradar el ambiente.

Marchamos ahora paralelos a la autovía, el camino muy pestoso duro, con muchas piedras sueltas y baches, pasamos alguna carretera y al final por un puente que cruza la autovía ponemos rumbo a Fuensalida.

A partir de aquí marcho solo, otros biker se quedan atrás y al poco miro y no veo a nadie, pero tampoco por delante que me de referencias o mas bien me motive, por el contrario al llevar un ritmo fuerte cuando paso por un banco de arena me frena mucho y después me cuesta volver a coger el ritmo y en esos momento noto el esfuerzo realizado, pero Fuensalida esta ya ahí.

Entro en Fuensalida, indicaciones en el suelo y la policía municipal en los cruces, derechos al pabellón. En el pabellón veo a algunos ya con la cerveza en la mano, otros se están duchando, hoy he sido yo casi el “porra” del grupo, jeje, me bebo la cerveza, no hay bebida isotónica como esta, y voy al coche para coger los bártulos e ir a ducharme antes de comer.





Tras la ducha me reuní con todos, los que faltaban por llegar ya están aquí, mientras vamos comiendo algunos sándwich que quedaron del avituallamiento y dándole a la cerveza, para dar tiempo a la caldereta, comentamos como ha ido la ruta, la rubia de Noves, la caída, la arena y los caminos pestosos que hay en esta época del año. La caldereta ya esta lista y nos liamos a comer,





repetimos, bebemos mas cerveza.



Llega la entrega de premios, esta vez no hay suerte, nos superan en numero el Cedena y el Karacol, al mas veterano un hombre del club local con 72 castañas, después sorteos que tan solo Leandro recoge algo, los demás nos tenemos que contentar con la bolsa de la inscripción, bien repleta en la que tan solo faltaba un jamoncito dentro. Dejamos el baño para otra ocasión y nos disponemos a volver a casa que con un poco de suerte llegamos a comer, antes nos despedimos de los conocidos, Luismi, Julián y Félix ya habían partido que tenían que volver pronto a Sonseca, los demás esperamos encontrarnos de nuevo en una de las próximas cicloturistas o cualquier quedada que realicemos.